Mi clienta quería un retrato familiar diferente: para recordar cinco generaciones de una familia, incluyendo a su madre, recientemente fallecida.
El retrato se centraba en una reliquia familiar: un collar que llevaba la matriarca y que se transmitía de generación en generación. Cada miembro de la familia fue fotografiado sosteniendo la reliquia: madre, hija, nieta y bisnieta.
Las fotografías se tomaron en Fuji Velvia 50 y se distribuyeron a los familiares como polípticos enmarcados.



